Pendientes almohades de plata dorada
Con forma de media luna, tiene como decoración el árbol de la vida y dos halcones sobre la Básmala: «En nombre de Dios, el Clemente, el Misericordioso»; rodeada del cordón de la eternidad. Forman parte del tesorillo de Mallorca, encontrados en una cueva. Pertenecían al ajuar de una novia almohade, que los ocultó durante la reconquista de Mallorca del Rey Jaume I (1229 d.C.).